La dársena catalana, una de las dos españolas autorizadas para mover animales vivos, casi triplica la exportación de reses al entrar en Jordania, Arabia Saudí y Marruecos.
El puerto de Tarragona ha exportado más de 107.000 animales vivos, vacunos y ovinos, en los primeros cuatro meses del año, frente a las 37.489 reses del mismo periodo del ejercicio precedente.
Ello supone casi triplicar estos flujos en un año. Un crecimiento debido a la apertura de tres nuevos mercados, Jordania, Arabia Saudí y Marruecos, que se suman así a los más tradicionales del Líbano, Libia y Argelia, entre otros destinos. La pasada semana, la dársena catalana realizó la primera exportación de animales vivos a Marruecos: un embarque de 2.410 unidades de ganado vacuno con destino al puerto de Jadida, situado a 100 kilómetros de Casablanca.
Las exportaciones de ganado desde el puerto de Tarragona tienen como destino principal Oriente Medio, el norte de África y otros puertos de la cuenca mediterránea. “Países como Jordania, con 57.000 reses exportadas, Arabia Saudí, con más de 21.000, y Libia, con 16.000, han hecho crecer este tráfico durante los primeros meses del año”, destaca un comunicado de la Autoridad Portuaria.
El puerto de Tarragona es uno de los dos puertos españoles autorizados por el Ministerio de Agricultura para la carga de ganado vivo, junto con el de Cartagena. La dársena catalana se estrenó en esta actividad con 20.000 cabezas de ganado en el año 2012. Durante 2019, exportó 242.000 unidades de animales vivos. Proceden principalmente de Cataluña, Aragón, Navarra, Castilla-La Mancha y Castilla y León.
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