El grupo, que fabrica 1.300 unidades al día en España, pone en competencia flujos marítimos y ferroviarios que gestionaba CAT.
Renault está ultimando un concurso para la gestión de los tráficos de vehículos terminados en Europa. El grupo automovilístico, que fabrica una media de 1.300 unidades diarias en sus plantas de producción de Valladolid y Palencia, pone así en competencia los flujos marítimos y ferroviarios que hasta ahora gestionaba CAT
Renault ha decidido poner en competencia los tráficos de vehículo terminado que han venido dependiendo históricamente de su antigua filial de transporte CAT, de la que se desprendió hace una década. Renault, que ya había puesto en competencia hace unos años sus tráficos en la fase de aprovisionamiento, ha decidido hacer lo mismo para toda su producción europea de vehículo terminado, que supera el millón de unidades anuales, para lo que ultima la convocatoria de un tender a nivel europeo.
CAT ha sido hasta ahora el operador global de Renault en distribución, encargándose de gestionar todo el transporte de vehículos. Básicamente, “Renault se limitaba a dar la fecha en la que quería que el vehículo estuviese en manos del cliente y era CAT el que decidía cómo lo llevaba”, señalan fuentes de la automovilística. “Lo que se quiere hacer ahora es trocear la distribución”, matizan las mismas fuentes. Es decir, “se van a poner en competencia los tráficos marítimos y ferroviarios de vehículos nuevos, que hasta ahora subcontrataba la propia CAT”, mientras que ésta “va a mantener con toda probabilidad la gestión de campas y la distribución por carretera”.
En este sentido, el grupo automovilístico ha tenido en cuenta que actualmente “CAT es una empresa sin medios, lo subcontrata todo”. Por lo que se trata, en definitiva, de que “Renault va a tomar las riendas y negociar directamente con navieras y operadores ferroviarios”. Como ya se ha indicado, en la fase de aprovisionamiento sucede algo similar a lo que se va a poner ahora en marcha en vehículo terminado, es decir, Renault contrata a navieras directamente o a través de transitarios.
En el caso de España, Renault gestiona tráficos marítimos a través de los puertos de Santander, Barcelona, Tarragona y Gijón. Para la compañía operan navieras como Maersk, MSC, Hapag Lloyd, entre otras, siempre dependiendo de qué eje marítimo se trate. En ferrocarril, la factoría de Renault en Valladolid recibe todos los días un tren que opera Transfesa entre Francia y España. Este tren, que mueve cajas móviles, se parte en Venta de Baños, desde donde salen dos convoyes diferentes, uno para PSA y otro para Renault, que dispone de una terminal intermodal propia dentro de sus instalaciones en Valladolid.
A su vez, en el caso del aéreo, “nuestro objetivo sería no hacer nada, pero hay que recurrir a él cuando es una cuestión de urgencia y no queda más remedio”. El aéreo lo contrata directamente la casa matriz en Francia y se hace a través de los aeropuertos de Valladolid, Vitoria o Madrid. En la actualidad, Renault produce cerca de 1.300 vehículos diarios en España. En la fábrica de Valladolid, considerada en su día la más productiva del grupo, la producción diaria es de 350 coches al día de los modelos Modus y Clio. Esta factoría llegó a producir hace unos años hasta 1.250 coches diarios en tres turnos.
Por su parte, la planta de Palencia fabrica 940 coches modelo Megane al día en dos turnos. En la producción influye mucho el modelo que se fabrica y el Modus no ha sido bien acogido por el mercado. Aunque esta situación es previsible que mejore a corto plazo, puesto que a finales de año se deja de producir en Valladolid el citado Modus y en febrero de 2013 el antiguo Clio. La planta, que fabrica también el vehículo eléctrico Twizy, pasará a fabricar desde febrero un modelo de estreno en el mercado.
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