El proyecto de Corredor Mediterráneo ferroviario entre Castellbisbal (Barcelona) y Vila-Seca (Tarragona), que consiste en dotar a la red de ancho ibérico el internacional mediante la implantación del tercer carril, incluye en su trazado la zona sur del complejo petroquímico de Tarragona, pero no la zona norte, donde opera Repsol. “Nos interesa que llegue el ancho internacional, sobre todo para exportar al norte de Europa”, señala Joan Pedrerol, director de Repsol Tarragona.
Para estos tráficos, utiliza el camión hasta el puerto de Barcelona, para trasvasar la carga al tren en ancho de vía internacional, o hasta Le Boulou (Francia), para subir el semirremolque a la autopista ferroviaria de Lorry Rail. Repsol utiliza básicamente el transporte marítimo. La compañía confía en que las negociaciones con el Ministerio de Fomento lleguen a buen puerto.