La evolución del comercio electrónico desde la década de los 90 es imparable
El mes de diciembre llega, logísticamente hablando, marcado por el Black Friday y la campaña de Navidad, lo que hace inevitable pararnos a analizar la situación del comercio electrónico y su impacto en la gestión de la cadena de suministro. La evolución de este canal desde la década de los 90 es imparable, al tiempo que se cuestiona su rentabilidad y el impacto operativo que genera un elevado pico de demanda concentrado en tan breve espacio de tiempo.
El III estudio sobre la logística del e-commerce llevado a cabo recientemente por el Centro Español de Logística y NTT Data, actualiza el coste de los envíos, la inversión en inmologística y analiza el impacto del packaging, las promociones y la logística inversa, adentrándonos en los desafíos y oportunidades de un canal en permanente dinamismo por los cambios del mercado y de los consumidores.
Entre los retos se encuentra el aumento del coste logístico por paquete, un 7% entre el 2021 y el 2023. El 70% de las empresas encuestadas no ve rentabilidad en estas campañas, y un 39% asegura que tiene pérdidas financieras en ese periodo. También la falta de personal cualificado para cubrir el aumento de plantilla, impacta en retrasos y errores en las entregas, afectando en un 41,5% de los casos a la reputación de las empresas.
El informe pone de manifiesto el eterno desfase entre las previsiones de compras y las ventas reales, lo que no es una exclusividad del canal de comercio electrónico, pero sí hace necesario seguir trabajando, no tanto en reducir la variabilidad de la demanda como en predecirla mejor.
Ana González
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