La terminal, con una inversión de 75 millones de euros, moverá dos millones de toneladas de productos siderúrgicos en 2009.
Ros Casares estudia la externalización de la gestión de su futura terminal polivalente del puerto de Sagunto, en la que moverá dos millones de toneladas anuales a partir del ejercicio 2009. La terminal, que absorberá una inversión de 75 millones de euros, dará servicio a la futura planta de fabricación de chapa de acero de Ros en Sagunto
La compañía metalúrgica valenciana Ros Casares estudia la externalización de la gestión de su terminal polivalente del puerto de Sagunto, que pondrá en servicio en la ampliación del enclave en el ejercicio 2009, con el objetivo de que una estibadora especializada en la logística de productos siderúrgicos comande la explotación de las nuevas instalaciones. Para ello, Ros Casares no descarta un cambio en el control accionarial de la terminal, ya que el grupo no cree que sus planes logísticos pasen por la gestión de terminales marítimas, aunque si por la gestión de almacenes logísticos dentro de los puertos. De esta forma, la dirección de la compañía metalúrgica, que preside Francisco Ros García, estaría sondeando el mercado de estibadoras interesadas en liderar la gestión de la nueva terminal.
Entre las empresas candidatas a quedarse con el contrato de explotación de la terminal polivalente estarían las estibadoras Marítima Valenciana, Algeposa o Porlesa, que ya trabajan esta clase de tráficos en la primera dársena del puerto de Sagunto desde hace varios años, según ha podido saber este periódico en fuentes solventes. Terminal Polivalente Portuaria de Sagunto, liderada por Ros Casares con un 55 por ciento de las acciones, está formada además de la compañía metalúrgica por Grupo Boluda, Banco de Valencia y Arcelor, que ha pasado a detentar un dos por ciento del accionariado tras que esta empresa no acudiera a la última ampliación de capital de TPPG.
La nueva terminal polivalente del puerto de Sagunto absorberá una inversión de 75 millones de euros en la construcción y puesta en marcha de las nuevas instalaciones en el Muelle de Costa, donde contará con un atraque de 470 metros lineales, con una inversión prevista en la construcción de unos 60 millones de euros y quince millones de euros para la adquisición de maquinaria para la operativa de productos siderúrgicos, así como de mercancía general, cuyos tráficos liderarían las navieras de Grupo Boluda. Sagunto, puerto siderúrgico El principal objetivo de la nueva estibadora es dar servicio al proyecto Brava de Ros Casares en Parc Sagunt, que, con una inversión de 442 millones de euros, pondrá en servicio una gran planta de fabricación de chapa de acero para la industria del automóvil.
Del total de la producción, un 30 por ciento se pretende exportar a través del puerto de Sagunto al área del Mediterráneo y Extremo Oriente, según señalan fuentes de la compañía. El objetivo es convertir al puerto de Sagunto en el principal enclave siderúrgico del Mediterráneo, gracias a su posición geográfica en relación con las principales factorías automovilísticas españolas receptoras de una parte del acero que producirá Ros Casares en su planta de Sagunto.
La nueva terminal polivalente número dos de la segunda dársena del puerto de Sagunto moverá dos millones de toneladas anuales de productos siderúrgicos a partir de 2009, ejercicio en el que la empresa prevé iniciar la explotación de sus instalaciones de 120.000 metros cuadrados en el Muelle de Costa. Los nuevos tráficos vendrán a sumarse a los registros actuales del enclave que durante el pasado ejercicio 2007 movió tres millones de toneladas de productos siderúrgicos.