Insiste en la necesidad de contar con “fundadas previsiones” de tráfico para considerar su revisión, lo que choca con el plan de negocio presentado por el operador Decoexsa.
Sanidad hace oídos sordos a las reivindicaciones del Gobierno vasco, que reclama reabrir el PIF del aeropuerto de Vitoria, y sigue sin mover ficha para revisar la suspensión de la instalación. Insiste en la necesidad de contar con “fundadas previsiones” de tráfico, lo que choca con el plan de negocio que Decoexsa puso encima de la mesa
El Gobierno vasco, que reclama con insistencia la reapertura del PIF del aeropuerto de Vitoria, suspendido desde hace más de un año, pincha en hueso. El Ministerio de Sanidad ha hecho oídos sordos y sigue sin mover ficha para pedir a la UE la puesta en marcha de la instalación, encargada del control de alimentos y animales vivos. Fuentes del departamento de Ana Mato, consultadas por TRANSPORTE XXI, se limitaron a recordar que “las suspensiones de los PIF son temporales”, por lo que en caso de una “variación significativa de los flujos comerciales, podrían ser revisadas”.
La respuesta resulta llamativa, teniendo en cuenta las gestiones llevadas a cabo por el operador de handling Decoexsa, uno de los grandes damnificados por la actual situación, que se ha visto obligado a desviar importantes operaciones de carga a otros hub europeos. Como ya adelantó este periódico, la compañía se había hecho con un tráfico de importación de 500 caballos anuales procedentes fundamentalmente de Argentina con destino a España y Europa y otro de 15 toneladas a la semana de productos perecederos.
La idea era “utilizar Vitoria como base de las operaciones de carga”, según explicaron responsables de Decoexsa, ya que tanto exportadores como importadores habían mostrado su interés por la terminal alavesa por la “calidad de sus instalaciones y la existencia a menos de un kilómetro de un lugar de descanso para los animales”, tras recordar que “Madrid está saturado”.
Sin embargo, la ausencia del PIF obligó al operador a desviar la mercancía hacia otros aeropuertos. La propia compañía envió hace unos meses una carta a Aena en la que alertaba de la pérdida de “numerosas operaciones de carga aérea” en Vitoria en caso de no reabrirse el PIF. A tenor de la respuesta de Sanidad, que insiste en la necesidad de contar con “fundadas previsiones” de tráfico, los planes de negocio de Decoexsa no justifican la revisión de la suspensión del PIF del aeropuerto de Vitoria.
El cierre de la instalación, junto a la supresión de la condición H-24 (abierto las 24 horas), dibuja un escenario oscuro para el desarrollo de la carga en el aeropuerto de Vitoria, que ocupa el cuarto puesto del ranking en España por volumen de mercancías, con un movimento de 26.745 toneladas durante los siete primeros meses del año y un crecimiento del 22,6 por ciento.