El puerto seco de Zaragoza, que redujo un 50% el estocaje de coches en 2009, almacena maquinaria, graneles y contenedores.
La crisis en el sector de la automoción ha obligado al puerto seco de Santander-Ebro a diversificar su actividad. La terminal privada, que registró un descenso superior al 50 por ciento en la cifra de automóviles gestionados en su campa en 2009, ha apostado por potenciar el almacenaje de maquinaria, graneles y contenedores
El puerto seco de Santander-Ebro, ubicado en la localidad zaragozana de Luceni, ha decidido diversificar su actividad para hacer frente a la fuerte caída en los movimientos de vehículos en sus campas, como consecuencia de la crisis en el sector de la automoción. Santander-Ebro registró un descenso del 54 por ciento en la cifra de vehículos que pasaron por su campa en 2009, al pasar de las 50.000 unidades en 2008 a 23.000 el pasado año. “La apuesta por la diversificación nos ha permitido mantener los niveles de rentabilidad pese a la caída en ventas”, asegura el gerente del puerto seco, Carlos Andrés.
En concreto, Santander-Ebro ha desarrollado actividad en 2009 en otros sectores, como el almacenaje de embargos (maquinaria industrial, remolques, etc), de contenedores y graneles procedentes de terminales portuarias, así como la gestión de parques de maquinaria agrícola. Paralelamente, el puerto seco ha incrementado su actividad de valor añadido en el sector de la automoción, para lo que ha cerrado dos contratos con sendas aseguradoras para desarrollar labores de reparación de vehículos.
Por su parte, el apeadero ferroviario de la terminal sólo ha gestionado el tráfico de una decena de trenes en todo 2009. Estos trenes transportaron vehículos terminados procedentes de la planta de General Motors en Figueruelas (Zaragoza) hasta el puerto de Barcelona y cuyo destino final era Grecia. Por su parte, el tráfico regular a través de ferrocarril que operaba la terminal para General Motors en 2008 quedó cancelado, ya que “se trataba de un tráfico que nos derivaron como consecuencia de haber superado el exceso de capacidad en la planta de Opel, algo que ahora no ocurre”, aclara Andrés.
Además, en 2008 la terminal también gestionó tráficos por ferrocarril procedentes de la factoría de Seat en Martorell (Barcelona). “El tráfico regular por ferrocarril es cada vez más complejo, puesto que el camión es cada vez más versátil y más barato”, señala Andrés. Aún así, el puerto seco negocia en estos momentos reactivar los tráficos de contenedor en 2010. Estos tráficos pasaron de 3.200 UTIs en 2008 a poco más de 500 en 2009.
Las expectativas están puestas en que “tenemos una ventaja competitiva con respecto a las terminales públicas del Adif y es que operamos las 24 horas durante los 365 días del año”. Santander-Ebro alcanzó unas ventas de 0,97 millones de euros en el año 2007.