El grupo logístico mantiene la actividad en sectores como la alimentación y productos químicos, mientras se resiente en automoción, obras e industria.
Grupo Logístico Santos, nombre comercial con el que opera la sociedad Santos Transportes Europeos, ha decidido paralizar inversiones, “excepto las estrictamente necesarias”, tras la caída de volúmenes experimentada durante el estado de alarma y “a la espera de la evolución del mercado en un par de meses vista” tras el final del confinamiento, según ha avanzado a TRANSPORTE XXI el director comercial de la compañía, Alfonso Santos Sánchez.
La compañía registró durante las semanas previas a la declaración del estado de alarma un incremento significativo de actividad, “muy por encima de las previsiones y de cualquier otro año en las mismas fechas”, sobre todo en relación con flujos “de la rama alimentaria de primera necesidad, aumentando mucho transporte así como stocks en los almacenes”, señala Santos.
Sin embargo, “ese atracón era un mero espejismo y según ha ido ampliándose el estado de alarma la actividad fue bajando, bajando y bajando”. En este sentido, “marzo se consiguió salvar de aquella manera, pero abril fue un desastre y mayo será muy similar”, apunta.
La bajada más importante se da en la actividad ligada a automoción, obra e industria, “llegando a cifras incluso del 80 por ciento de media”, mientras que, por el contrario, “en las ramas de alimentación y químico que trabajamos la bajada ha sido menor”. No obstante, “hasta que el canal Horeca y el turismo no estén al cien por cien, esto no va a remontar”, advierte Santos.
La empresa rompió el pasado año la racha de crecimientos de dos dígitos de los años anteriores. “Ya se venía sintiendo una desaceleración, con muchas desinversiones y bajada del consumo”, señala. Al final, “logramos mantenernos, que dada la situación no era fácil, y de cara al cierre de 2020, solo se puede pensar en hoy, mañana y como mucho pasado mañana”, lamenta Santos.
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