Presenta una reordenación espacial de la concesión del Muelle AZ-2, que contempla la instalación de un sistema de descarga y apile automático en el tráfico de pulverulentos, con una inversión de 1,5 millones de euros.
La empresa Servicios Logísticos Portuarios (SLP), estibadora, consignataria y agente de línea regular que opera en el puerto de Bilbao, contempla nuevas inversiones para reducir la huella ambiental en la dársena vasca.
El operador prevé instalar en su concesión del Muelle AZ-2 de la zona de ampliación una cinta de descarga y apile automático para aminorar las emisiones de partículas y polvo generadas en la manipulación y almacenamiento de graneles sólidos pulverulentos, según ha podido saber este periódico. La instalación, con un presupuesto estimado de 1,5 millones de euros, contará con un sistema que aportará humedad al producto.
El proyecto se enmarca dentro de la reordenación espacial solicitada por SLP en su terminal del Muelle AZ-2, por motivos operativos y de explotación, manteniendo el actual destino concesional.
La petición de la estibadora responde al acuerdo del Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Bilbao, que en su sesión del 4 de abril del pasado año declaró la necesidad de rescatar parcialmente una superficie de 10.000 metros cuadrados vinculada a la concesión de SLP en el Muelle AZ-2, de los 30.000 metros cuadrados que dispone.
La decisión incluía el traslado de la actividad asociada a los tráficos de graneles sólidos pulverulentos a un nuevo ámbito concesional en el Muelle AZ-1. En concreto, en la parcela ocupada anteriormente por Fertiberia, “al disponer de los requerimientos y condiciones necesarias para acoger este tipo de actividad”, según señalan desde la entidad portuaria, que considera “incompatible” este tipo de tráfico con el resto de usuarios colindantes, sobre todo tras las sucesivas implantaciones en esta zona portuaria, caso de Haizea Wind, Lointek Heavy Industries y Cronimet Hispania.
Sin embargo, SLP considera que la nueva ubicación no cuenta con la misma equivalencia espacial y operativa para el desarrollo de la actividad indicada. Según apunta el operador, para el tráfico de arenas, que se ha disparado en los últimos años hasta alcanzar las 800.000 toneladas anuales, se requiere una superficie de 16.000 metros cuadrados. Además, añaden desde SLP, la línea de atraque de 100 metros del Muelle AZ-1, compartido con Ineos Sulphur Chemicals Spain, frente a los 300 metros del Muelle AZ-2, impide operar dos y tres barcos de forma simultánea, lastrando la competitividad del servicio. Por ello, la compañía ha presentado una nueva ordenación espacial en su concesión del Muelle AZ-2, que ha elaborado la consultora Abaco. La actuación, que incluye la ya mencionada instalación de un sistema de descarga y apile automático, contempla el traslado del tráfico de arenas a la zona de la concesión actual más cercana al AZ-1, derivando a la nueva superficie concesional en el Muelle AZ-1 el tráfico de importación, sobre todo chatarras, con un régimen de atraque preferente.
SLP, que dispone de 140.000 metros cuadrados en concesión en el puerto de Bilbao y una línea de atraque de 1,7 kilómetros, con calados de hasta 20 metros, cerró 2019 con un tráfico de cerca de 2,3 millones de toneladas, un registro similar al del año anterior.