A trancas y barrancas, con muchas dudas por parte de Alemania y sólo gracias a una mayoría cualificada, el Consejo de Ministros de Transportes de la UE aprobó que los tacógrafos digitales sean obligatorios en los vehículos de más de 3,5 toneladas.
Ahora, es necesario que el Parlamento Europeo haga una segunda lectura del proyecto y, tras su debate, vote si se aprueba definitivamente. Una parte de los estados miembros de la UE son partidarios de dejar en ese límite de las 3,5 toneladas la exigencia del tacógrafo digital, pero muchos eurodiputados quieren llevarlo hasta las 2,8 toneladas.