El puerto de Santa Cruz ampliará su superficie en 120.000 m2 y prevé tener en cuatro años la dársena de Granadilla funcionando.
El puerto de Tenerife ha iniciado contactos con varias navieras internacionales para ofrecer la dársena como base de operaciones de 400.000 TEUs de transbordo a partir del ejercicio 2010. Las terminales de Capsa y Contenemar, en fase de ampliación de sus instalaciones, tendrán 120.000 metros cuadrados más de superficie
La Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife ha iniciado una ronda de conversaciones con varias navieras internacionales para que puedan elegir a partir del ejercicio 2010 el enclave tinerfeño como base de sus operaciones de transbordo en el Atlántico, según ha asegurado su presidente Pedro Rodríguez Zaragoza. La intención del puerto canario es atraer un tráfico de 400.000 TEUs anuales de transbordo internacional a Tenerife, duplicando los tráficos de contenedores actuales, “para hacer rentable la actividad”, posicionar al puerto en un nuevo nicho de negocio, ya que durante 2007 el enclave canario sólo manipuló 24.500 contenedores de transbordo, y elevar la facturación de la Autoridad Portuaria, que ingresaría un mínimo de dos millones de euros anuales en concepto de tasas con los nuevos transbordos.
Para poder poner en marcha este plan de captación de transbordos, Tenerife ultima la generación de 120.000 metros cuadrados de infraestructuras en las terminales de Capsa y Contenemar, que se estima puedan estar concluidas en diciembre de 2009. El plan de inversiones del puerto de Tenerife para 2008 asciende a 79 millones de euros, de los que 30 millones se dedican a las primeras obras del nuevo puerto de Granadilla, que estará en funcionamiento dentro de cuatro años. Las inversiones en Santa Cruz ascenderán a un global aproximado de 15 millones de euros durante 2008.
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