El operador, controlado por Erhardt, Noatum Maritime y Nogar, elevó cerca de un 30% su movimiento total de mercancías en 2023, hasta rondar 1,5 millones de toneladas.
Terminal Marítima de Cartagena (TMC) continúa con su apuesta de crecimiento a través de la diversificación de sus tráficos. El operador logístico ha incorporado a la rada murciana el movimiento de acero para su exportación a México, con una previsión de más de 30.000 toneladas durante este año.
TMC, controlada por Erhardt, Noatum Maritime y Grupo Nogar, embarcó en el buque “Petra” cerca de 10.000 toneladas de pletinas y barras de acero con destino a Tampico (México). Esta primera operativa con el acero se desarrolló durante seis días del pasado mes de diciembre en el muelle de San Pedro de la dársena de Cartagena.
El operador logístico también añadió el tráfico de grava en 2023, destinado para la construcción del dique de abrigo del puerto italiano de Génova, y que supondrá un movimiento de 1,44 millones de toneladas.
La operativa con grava, que cuenta con la colaboración de la empresa cartagenera González Soto como suministradora de este granel, se inició el pasado mes de agosto en el frente E024 del muelle sur de Escombreras. La carga de 36.000 toneladas en el buque “Syder Olimpia” fue la primera de los dos embarques mensuales previstos durante 20 meses.
Los responsables de TMC estiman que en 2023 registraron un crecimiento cercano al 30 por ciento en su tráfico total, para rondar un volumen de 1,5 millones de toneladas. Los graneles sólidos son los principales impulsores del alza a doble dígito, y en el que destacan los cereales (harinas, trigo y cebada) con destino a la industria agroalimentaria española, junto con la grava, y seguidos de otros flujos menores como chatarra o el clinker.
Para impulsar los cereales agroalimentarios, TMC puso en marcha, en 2022, una nueva nave de almacenamiento en la dársena de Escombreras, con una superficie de 24.000 metros cuadrados y una capacidad de 160.000 toneladas. Este complejo supuso una inversión cercana a los 15 millones de euros.
Además, TMC, que en 2022 también incorporó los flujos de vidrio, procedente sobre todo de Oriente Medio, así como de madera en tablones o los billets de aluminio, calcula que durante el pasado año mantuvo su tráfico de contenedores con cerca de 50.000 TEUs en sus instalaciones de la dársena de Cartagena,