Navistar, el fabricante de los camiones International y de los motores del mismo nombre, se ha echado encima a sus cinco competidores en Estados Unidos -Volvo, Daimler, Mack, Detroit Diesel y Cummins- al presentar una solicitud para que sean revisadas las normas sobre limitación de emisiones contaminantes que entrarán en vigor a comienzos de 2010 y que son conocidas como EPA2010.
Navistar había solicitado ante un tribunal que se revisasen a la baja las exigencias de tales normativas pero las otras cinco marcas mencionadas, fabricantes todas ellas de motores Diesel, han recurrido las alegaciones de Navistar indicando que no están dispuestas a tolerar que nadie dilapide las grandes inversiones que han venido realizando todos estos años para alcanzar el cumplimiento de las citadas normas EPA2010.
La mayor parte de los fabricantes europeos y norteamericanos han optado por la técnica de reducción catalítica selectiva (SCR) que pulveriza una solución al 20 por ciento de urea en agua sobre los gases del escape con el objeto de eliminar los nocivos óxidos de nitrógeno, pero algunos fabricantes, como Navistar optaron en su momento por la solución conocida como EGR, iniciales en inglés de recirculación de los gases del escape, que reenvía éstos a nuevas combustiones.
En Europa, Scania y MAN han sido dos firmes defensores de esta alternativa, aunque reconociendo que con ella sólo se podían alcanzar los niveles Euro 5 con los motores de 6 cilindros en línea, siendo necesaria la solución SCR para los motores de 8 cilindros en V, ya que el calor generado en éstos con el EGR era difícil de disipar.