El operador solicita la prórroga de la concesión de su terminal de graneles en el puerto y valora nuevos proyectos e inversiones para impulsar estos tráficos.
Consignaciones Toro y Betolaza contempla acometer nuevos proyectos e inversiones en el puerto de Bilbao para impulsar su actividad en la gestión de graneles industriales, según informaron desde la empresa, a través de una nota. Una apuesta que viene acompañada de una petición a la Autoridad Portuaria de Bilbao para prorrogar la concesión de su terminal especializada en estos tráficos. La solicitud, en fase de información pública, es por un espacio de siete años, el máximo periodo contemplado en la normativa.
La terminal, ubicada en el muelle AZ-1, dispone actualmente de cinco almacenes cubiertos, con cerca de 8.000 metros cuadrados, y una campa exterior de 10.000 metros cuadrados. La concesión tiene capacidad para mover más de medio millón de toneladas al año.
Para el desarrollo de su actividad, el operador cuenta con maquinaria diseñada para el mantenimiento de instalaciones industriales y portuarias graneleras, que ha posibilitado la implantación de sistemas de medición de temperatura conectados con los clientes y la zona ADT (Almacén de Depósito Temporal) y DA (Depósito Aduanero), entre otros servicios adicionales, recoge la misma nota.
Planta de sulfato
La compañía completa su oferta en este ámbito con la renovación de la planta de sulfato, instalación preparada para la carga automatizada de minerales. Se trata de la única instalación de un operador portuario dotada de cintas automáticas para la carga de buques en el puerto de Bilbao, destacan desde la empresa. La inversión prevista a lo largo de los próximos meses supera el millón de euros. No obstante, “el plan de renovación está prácticamente concluido”, señalan los mismos interlocutores.
La planta, con una superficie de cerca de 12.000 metros cuadrados, está en condiciones de mover una media de 600.000 toneladas al año. Además, “la terminal puede adaptar y aumentar la gama de productos en función de los volúmenes que requieren los clientes, sus dos estaciones de descarga y su elevada ratio de ritmo de carga”, explican desde el operador.
Las actuaciones previstas se enmarcan dentro de la apuesta por la especialización y aumento de la capacidad de manipulación de graneles industriales en el puerto de Bilbao, como complemento a la oferta general en lo relativo al tráfico de componentes eólicos, productos forestales, siderúrgicos y cargas de proyecto.
Consignaciones Toro y Betolaza cerró el año 2022 con unas ventas de 40,7 millones de euros y un crecimiento del 18,5 por ciento con respecto al ejercicio anterior, según los datos recogidos en el suplemento especial “¿Quién manda en el transporte y la logística en España?”, que elabora cada año Transporte XXI.
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