Su alianza logística va a permitir el trasvase de 10.000 camiones anuales de la carretera al tren, a partir de enero, con la Autopista Ferroviaria entre Madrid y el puerto de Valencia y su posterior distribución marítima a Italia.
TransItalia estrenará la primera autopista ferroviaria que se ponga en marcha en España, bajo la operativa de Tramesa. Con la alianza de ambas compañías, el grupo italiano muestra su compromiso por una transformación del escenario del transporte en la península ibérica lanzando una ruta ferroviaria entre Madrid y el puerto de Valencia, y su posterior distribución marítima, lo que supone el lanzamiento de una logística multimodal, muy implantada en la Unión Europea, pero que era inexistente hasta ahora en España por el ancho de vía ibérico.
Con ello, la compañía, dirigida por Luigi D’Auria, consolida su apuesta por la multimodalidad y por el desarrollo de corredores libres de carbono entre la península y el norte de Europa, un negocio que ya viene impulsando entre Italia y Alemania en los últimos años, mientras que Tramesa extiende su actividad en el sector ferroviario con operaciones de tratamiento de mercancía en un recinto portuario.
El nacimiento de la Autopista Ferroviaria será en enero de 2024, de acuerdo a las previsiones que manejan TransItalia y Tramesa para poner en funcionamiento un tren semanal dedicado al acarreo de semirremolques, un servicio inédito entre terminales intermodales en España.
Con su lanzamiento, la logística peninsular tendrá un punto de inflexión, generando una autopista marítimo-ferroviaria, ya que el propósito final es embarcar los semirremolques procedentes del servicio ferroviario en las líneas de autopistas del mar que opera la naviera Grimaldi en el puerto de Valencia.
El plan de negocio marcado por TransItalia, un referente de la multimodalidad en Europa, es arrancar un primer tren de semirremolques que se realiza entre terminales españolas con periodicidad semanal para posicionar, a corto plazo, tres convoys semanales desde la terminal intermodal de Abroñigal (Madrid) y la nueva instalación que se va a levantar en el Dique del Este del puerto de Valencia, según han confirmado fuentes del grupo italiano a Transporte XXI.
Para ello, el flotista italiano ubicará su base en Madrid en la instalación de Abroñigal, operada por la UTE Renfe-Transfesa, en la que dispondrá de un aparcamiento de 4.000 metros cuadrados para el estacionamiento de 100 semirremolques, así como unas oficinas de 200 metros cuadrados.
En este sentido, el grupo italiano, que opera en España a través de su filial Transitalia 2004, está trabajando en nuevos proyectos con el desarrollo de otras rutas que vendrán a flexibilizar los tráficos de camiones a través del puerto de Valencia. La extensión de la autopista ferroviaria al interior de Portugal es una de las opciones manejadas.
El gran objetivo de la iniciativa es fomentar el traslado de semirremolques, sin conductor ni cabina tractora, al tiempo que se reduce a cero las emisiones CO2 del transporte por carretera. Juan Carlos Arocas, máximo responsable de TransItalia en España, ha explicado que el futuro servicio “también ofrece una alternativa a la actual problemática de falta de conductores en España y Europa”.
Trenes con 40 semirremolques
El convoy de la autopista ferroviaria va a estar compuesto por un máximo de 20 vagones con capacidad para dos semirremolques P-400 cada uno, por lo que un convoy completo tendrá una capacidad de carga de 40 semirremolques. Bajo esta composición, TransItalia planea sacar de la carretera y subir al ferrocarril, en la ruta entre Madrid y el puerto de Valencia, alrededor de 10.000 camiones anuales.
Para ello, será fundamental lograr una flexibilización de la operativa en las terminales. Tramesa estima que la operación de un tren completo en la instalación del Dique del Este esté completada en un máximo de cuatro horas. Para ello, la compañía instalará un puente grúa, actualmente en construcción, que permitirá la carga y descarga de los contenedores que serán posicionados por mafis junto a la instalación. La grúa estará automatizada, con la lectura automática de los semirremolques que permitirá la digitalización del tratamiento documental.
Junto al puente grúa, Tramesa ha adquirido una flota de 55 vagones del tipo T4000 al fabricante Tatravagonka, lo que permitirá el transporte de los semirremolques en el corredor. La compañía tiene prevista adjudicar la tracción del servicio en breve, para lo cual no se descarta realizar un tender abierto entre las compañías ferroviarias que vienen trabajando en la península ibérica.
Por su parte, TransItalia ha adquirido 150 semirremolques P-400 a Lecitrailer para aumentar su oferta de transporte entre España e Italia, así como para los flujos que se acarrearán en la autopista ferroviaria Madrid-Valencia y en el nuevo servicio intermodal Pádova-Livorno que va a arrancar en Italia. Asimismo, ya tiene prevista la incorporación de otras cien unidades, ante el fuerte crecimiento de sus servicios intermodales. TransItalia, que dispone de una flota de 2.500 semirremolques P-400, superó los 60.000 embarques en 2023, un volumen que prevé incrementar notablemente a partir de 2024, cuando comience a operar la nueva autopista marítimo-ferroviaria.