Grúas y Transportes Sierra, con sede en la localidad madrileña de Torrejón de Ardoz, ha pactado un expediente de regulación de empleo (ER) de suspensión que afectará a la totalidad de su plantilla, integrada actualmente por 120 trabajadores. El expediente pactado, sobre cuyas conversaciones ya se hizo eco este periódico, tiene carácter rotatorio y una duración de cuatro meses, según fuentes solventes consultadas por este periódico.
Además, el acuerdo alcanzado entre empresa y representación sindical contempla una compensación económica a los trabajadores durante su estancia en el paro, así como una garantía de no realizar ningún despido por parte de la empresa a corto plazo, algo que en el acuerdo se define como “blindaje futuro de los puestos de trabajo”. Grúas y Transportes Sierra se ha visto obligada a recurrir al mencionado ERE como consecuencia de la crisis en el sector de la construcción, al que pertenecen algunos de los principales clientes de la compañía, tales como FCC, OHL o Sacyr Vallehermoso, entre otros.
La compañía dispone de unas instalaciones centrales de 30.000 metros cuadrados en Madrid y con una base en Guadalajara. Transportes Sierra cuenta con una flota integrada por 40 cabezas tractoras, 40 semirremolques y 60 camiones tipo grúa. La compañía, propiedad de la familia Sierra Navarro, alcanzó una facturación de 19,05 millones de euros en el pasado año, según datos oficiales del Registro Mercantil.