El operador postal privado Unipost ha presentado un expediente de regulación de empleo (ERE) con el que pretende la extinción de 435 de los 2.600 puestos de trabajo con los que cuenta la compañía. Fuentes de la compañía que dirige Pablo Raventós han señalado que la crisis económica “ha provocado en el sector postal un descenso generalizado de la actividad de marketing directo, un recorte de márgenes y la progresiva sustitución de los envíos físicos por las nuevas tecnologías”.
Como consecuencia de esta situación y según la propia empresa, “Unipost se ha visto obligada a emprender un plan de ajuste para no entrar en pérdidas”. El mencionado plan conlleva la reducción de los gastos generales, la reducción de plantilla y la negociación de las condiciones salariales. En este sentido, fuentes de la compañía han señalado a este periódico que es imprescindible acometer este plan puesto que “si no se toman medidas, Unipost puede cerrar el año próximo con pérdidas”.
Además, las mismas fuentes han señalado que las previsiones de la compañía para el presente ejercicio, que señalaban un incremento de la facturación del 12 por ciento respecto de los 107 millones alcanzados en 2008, no se van a poder cumplir “porque el escenario actual es completamente distinto del previsto”. Paralelamente, según fuentes sindicales, Unipost ha presentado un conflicto colectivo en relación con el convenio que tiene firmado con los trabajadores, ya que “pretende conseguir que no se lleve a efecto una subida salarial ya pactada y que se acuerde una congelación salarial para el próximo ejercicio”.
Este punto será también debatido en las reuniones previstas para la negociación en torno al ERE entre empresa y el comité intercentros, en el que están representados los sindicatos UGT, CCOO, USO y CGT. Además, según ha podido conocer este periódico de fuentes solventes, el plan de ajuste de Unipost contemplaría también un recorte en el número de poblaciones que atiende actualmente y que por sus características geográficas o en función de su población no son rentables para llevar a cabo su operativa de reparto. En estos momentos, Unipost asegura cubrir el 70 por ciento del territorio español. De esta manera, en función de esta decisión se determinarían en que áreas se acometerían los despidos previstos.