Vanesp Ibérica Transitarios, filial española del grupo transitario portugués Vanesp, ha dedicado el último ejercicio a diversificar su cartera de clientes en España, tras dejar de prestar servicios de manera regular para el grupo Inditex, hasta hace poco su cliente de referencia en nuestro país. Vanesp recibió la mala noticia de que “nuestro principal cliente en España, el grupo Inditex, decidió asumir con medios propios la mayor parte de la actividad de transitario que hasta ese momento veníamos realizando para ellos en España.
En concreto, Inditex asumió la contratación sin intermediarios con las aerolíneas para los dos aviones semanales desde el aeropuerto de Zaragoza que hasta ese momento estaba realizando a través de Vanesp”, señala Helder Couto, country manager de Vanesp en España.
“La incidencia de esta decisión en nuestra facturación fue muy significativa”, reconoce Couto. A partir de ese momento, Vanesp, que sigue trabajando con Inditex pero en mucha menor medida y para casos concretos, se tuvo que lanzar a captar nuevos clientes.
“La compañía decidió desde el primer momento, pese a la salida de Inditex, mantener abierta y operativa la filial española, porque se trata de un interés estratégico para la casa madre”, asegura Couto. En este sentido, en los últimos meses ha incorporado a su cartera de clientes a diversas compañías del sector de la automoción, tecnologías, etc.
Entre ellas destaca el reciente acuerdo que han firmado con Mediapro. El perfil del cliente de Vanesp es la empresa española, así como empresas foráneas compradoras de producto a españolas.
Vanesp, en cifras
La transitaria tiene sede central en Oporto (Portugal) e inició actividad hace una docena de años. En España abrió filial, con sede en Madrid, en el año 2007. Además, opera en el resto del mundo vía colaboradores.
La actividad de la compañía se divide casi al 50 por ciento entre operaciones marítimas y aéreas.
Vanesp Ibérica Transitarios registró una cifra de ventas de 7,85 millones de euros en 2011, frente a los 12,65 millones del año anterior (-38 por ciento), según datos del Libro Blanco del Sector Transitario que edita TRANSPORTE XXI.