Hapag-Lloyd arrancará, el próximo 14 de abril, la incorporación de la escala en Termavi a su conexión semanal con las costas oeste y este de Sudamérica.
Hapag-Lloyd reforzará los tráficos de fruta y pesca congelada del puerto de Vigo con el inicio de una nueva línea semanal en Termavi, que enlazará con las terminales sudamericanas de Buenaventura (Colombia); Paita (Perú); Posorja y Guayaquil (Ecuador); Manzanillo (Panamá); Puerto Limón (Costa Rica); y Cartagena (Colombia).
El buque “Irenes Remedy, de 2.824 TEUs, iniciará, el próximo 14 de abril, en las instalaciones de la terminal de contenedores del puerto gallego esta rotación semanal. Transportará fruta y pescado congelado, entre otras mercancías, y embarcará madera y otra carga general.
El puerto de Vigo se sitúa como la primera escala en Europa de la línea del armador alemán, que continúa por las dársenas de Málaga, Valencia, para seguir por las italianas de Civitavecchia, Salerno, Génova y Livorno, e ir a Barcelona antes de volver a cruzar el Atlántico.
La naviera, además del “Irenes Remedy”, también empleará los buques “As Carelia” y “As Claudia”, también de 2.824 TEUs; “Emma A”, de 2.837 TEUs; “Cape Citius”, de 2.708 TEUs; así como a “Gemlik Express”, “Izmit Express” y “Mersin Express”, los tres con una capacidad de 2.586 TEUs.
El puerto de Vigo movió el pasado año un total de 230.039 toneladas de frutas, frente a las 178.877 toneladas de 2022, lo que supuso un incremento del 28,6 por ciento. Se trata de un tráfico eminentemente de importación, sobresaliendo Brasil, Costa Rica y Colombia como principales orígenes, y la piña, plátanos y melones como principales productos.
En el acumulado de este año, las frutas continúan en ascenso, al sumar 39.426 toneladas hasta febrero, que representan una subida del 6,23 por ciento con respecto al registro de los dos primeros meses del ejercicio anterior.
El crecimiento del tráfico de frutas del puerto de Vigo durante los últimos años tiene como hito la apuesta en 2020 por parte de CMA CGM de reestablecer la conexión con Sudamérica. La naviera francesa empezó en dicho ejercicio a realizar una escala semanal en Termavi, de la mano de la multinacional estadounidense Del Monte Foods, recuperando una conexión que la dársena gallega había perdido una década antes.