La rama europea del grupo sueco Volvo AB, que también comercializa los camiones norteamericanos Mack, los franceses Renault, los japoneses Nissan Diesel y los indios Eicher, ha reconocido que sus ventas netas -deduciendo la cancelación de pedidos de las nuevas órdenes de compra- arrojan un resultado patético en Europa, donde el grupo no habría vendido un solo camión durante los cinco meses de julio a noviembre y aún habría restado otros 1.645 camiones más a las ventas en meses previos.
En total, las entregas de Volvo durante el mes de noviembre de 2008 fueron un 21 por ciento inferiores a las 24.378 del mismo mes del año previo, lo que da idea del rápido deterioro de la situación si se tiene en cuenta que las entregas acumuladas por el grupo en los once primeros meses de 2008 ascendieron a 232.990 vehículos, cifra que aún supone un avance del 5 por ciento con relación al mismo período de 2007.
Particularmente negativa ha sido la evolución de las entregas de Renault Trucks, que se vieron reducidas en un 44 por ciento en noviembre último, quedando en sólo 4.659 unidades. Las 72.313 entregas del constructor francés durante los once primeros meses de 2008 aún ofrecían un aumento del 1 por ciento, pero conviene subrayar que si se consideran sólo los diez primeros meses del año, se habían entregado un 6 por ciento más camiones en 2008 que en 2007, lo que viene a incidir en la brutalidad de la contracción de la demanda.
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