La naviera extiende su oferta al tráfico de carga perecedera con un corredor marítimo desde Canarias y Marruecos para el desembarco de cítricos y tomates a los principales mercados del norte de Europa.
WEC Lines ha sumado equipo propio para hacer frente a las necesidades del tráfico de carga perecedera que viene realizando en sus operaciones en Europa. La naviera, filial de Grupo MSC, ha añadido a su parque un primer lote de 50 contenedores reefer de 45 pies, para poder dar servicio, entre otros, a nuevos servicios marítimos que ha puesto en marcha en las últimas semanas.
En concreto, WEC ha reforzado sus esfuerzos en el corredor marítimo que enlaza las Islas Canarias y Marruecos con el norte de Europa, buques que a su vez transitan por los principales puertos atlánticos, tanto de Portugal como del norte de España.
En este sentido, la naviera ha puesto en marcha un nuevo servicio directo entre Marruecos y Portugal, España y Reino Unido “como alternativa rápida y ecológica para los importadores de productos frescos al transporte terrestre”.
La compañía ha visto negocio en el desarrollo de este mercado, donde el ro-ro venía centrando el protagonismo desde el norte de África, destinando recursos propios y abriendo servicios específicos con un transporte alternativo y sostenible a la carretera.
Esta línea regular, que arranca en los puertos canarios de Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife, enlaza el enclave marroquí de Agadir con Sines, Setúbal, Leixoes, Vigo, Bilbao y Liverpool, para conectar desde el puerto británico con otros servicios de WEC hacia el noroeste de Europa. En concreto, a Países Bajos, Francia y Bélgica, donde los tomates y los cítricos marroquíes pueden llegar a los supermercados europeos por vía marítima. Para la importación desde Europa, el servicio enlaza Liverpool, Bilbao, Gijón, Vigo, Setúbal, Tenerife, Las Palmas y Agadir.
Caesar Luikenaar, director general de WEC Lines, explica que “la incorporación de nuevas unidades frigoríficas nos permite servir a nuestros clientes con un stock nuevo, así como satisfacer la gran demanda de nuevos contenedores y la disponibilidad de equipos en los mercados actuales”.
Y es que desde la naviera, que dispone de un flota propia de 11 buques, se indica que “la demanda de contenedores frigoríficos no ha dejado de aumentar en diversos sectores, como el de la alimentación y las bebidas, el farmacéutico y el sanitario”, mientras que las previsiones según la consultora Drewry apuntan a que el transporte de contenedores reefer crecerá a una media anual del 4 por ciento hasta 2028.
Los nuevos contenedores de 45 pies están todos equipados con un sistema de refrigeración de última generación para mantener un control preciso de la temperatura y un refrigerante con un bajo potencial de calentamiento global.