Consignaciones Toro y Betolaza, agente de la naviera, revela el incremento en un 133% de la operativa con ‘trailers’ y de un 31% en contenedores tras activar este año la segunda escala con Zeebrugge y Vigo.
Finnlines arrancó, a principios de 2024, con la doble conexión semanal entre los puertos de Bilbao, Vigo y Zeebrugge para sus servicios de carga rodada. El balance en el primer semestre de los tráficos en la dársena vizcaína refleja el fuerte crecimiento obtenido por una conexión ro-ro que desde la terminal belga enlaza con Reino Unido, Irlanda, Suecia y Noruega, así como con el resto de los continentes.
Consignaciones Toro y Betolaza, agente exclusivo de Finnlines en Bilbao, con un vínculo que se mantiene desde hace más de 50 años, reveló que “las operaciones con trailers se han incrementado un 133 por ciento y las de mercancía en contenedor un 31 por ciento durante el primer semestre”.
El operador portuario destaca, a través de un comunicado, que “los exportadores de semirremolques, vehículos, productos siderúrgicos, carga de proyecto, contenedores y de una amplia tipología adicional de mercancía han respondido positivamente a una oferta versátil y muy competitiva”.
La conexión de Bilbao, Vigo y Zeebrugge se realiza con los nuevos buques ro-ro híbridos “Ultra Green”, de la naviera del Grupo Grimaldi, que tienen una capacidad de transporte de 5.800 metros lineales cada una, con capacidad de hasta 420 remolques o 2.500 vehículos nuevos, y que también están diseñados para transportar cualquier tipo de mercancía general, así como componentes eólicos, como palas de aerogeneradores.
Los tres buques gemelos “Finneco I”, “Finneco II” y “Finneco III” incorporan baterías de litio para maniobras y estancia en el puerto sin emisiones, 600 metros cuadrados de paneles solares para producir electricidad sostenible para su uso a bordo, sistemas “Promas Lite” para aumentar la eficiencia energética y un innovador procedimiento de lubricación para optimizar la hidrodinámica, entre otros elementos.
Su contribución al ahorro de emisiones en la operativa logística posibilita que, por ejemplo, “un remolque transportado en sus bodegas entre Bélgica y España contamina un 27 por ciento menos que en una ruta tradicional por carretera”, según recoge la misma nota.
Para optimizar su operativa, Toro y Betolaza proyecta un desembolso de más de 8,5 millones en instalaciones y maquinaria, que se suma al esfuerzo inversor de los últimos años. El presupuesto se dirige a la compra de grúas puente con imanes, incluyendo software especializado para gestión y optimización de almacenes, una nueva grúa móvil, una CombiLift dotada con imanes para manipulación de chapa y otras adquisiciones de maquinaria como carretillas elevadoras. También prevé el cierre perimetral de sus instalaciones y asfaltado de la nueva ampliación concesional, así como la renovación de la planta de sulfato.
Consignaciones Toro y Betolaza, que participa en el proyecto europeo AutoMoTIF, dispone de una terminal multipropósito que cuenta con una superficie de casi 250.000 metros cuadrados, una zona adicional disponible de 60.000 metros cuadrados y un área de almacenaje de 55.000 metros cuadrados.
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