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El transporte urbano, en tránsito a las cero emisiones

El sector reclama mayor flexibilidad administrativa e impulsar la colaboración a la hora de descarbonizar las actividades para mejorar el reparto de última milla en las ciudades bajo el objetivo de una logística verde.

El sector de la última milla se enfrenta a nuevos retos con la puesta en marcha de las zonas de bajas emisiones que van a suponer oportunidades y desafíos para las empresas de transporte y las redes logísticas y de reparto que las sustentan. Este fue el marco de actuación de la jornada celebrada por el Instituto Tecnológico del Embalaje, Transporte y Logística (Itene) de Valencia, con Transporte XXI como medio colaborador.

Javier Zabaleta inauguró la jornada de Itene.
Javier Zabaleta inauguró la jornada de Itene.

La jornada, bajo el título “Green Urban Logistics”, inaugurada por Javier Zabaleta, director gerente de Itene, puso de manifiesto que la eficiencia logística y la sostenibilidad son claves para garantizar la competitividad y para poder cumplir con las nuevas regulaciones dentro del objetivo de lograr una logística verde.

Zabaleta señaló que “estamos ante un cambio de paradigma, con retos que hay que abordar de forma pragmática para que se conviertan en oportunidades de negocio”. En este sentido, el director de Itene puso como ejemplo lo sucedido en el sector logístico en Valencia con la DANA, “donde hemos visto que el impacto en un centro logístico tiene un alcance directo en la red de distribución”.

Por su parte, José Andrés Giménez, secretario técnico de Logistop, presentó las principales características de la plataforma para poder dar respuesta a las empresas. Avanzó que la plataforma quiere contar con un nuevo grupo de trabajo dedicado a la logística de catástrofes, señalando que “actualmente estamos viendo cómo de importante es la logística para la sociedad”, matizando que “queremos que las empresas encuentren soluciones de una forma colaborativa”.

En la apertura de la jornada, Ángel Navarro, técnico del Ayuntamiento de Valencia, explicó las grandes líneas que se han impulsado en la capital del Turia durante el ejercicio 2024, así como las nuevas políticas públicas para una mayor eficiencia logística en las ciudades.

Navarro señaló que “estamos en un cambio perpetuo en la logística donde las ciudades tienen mucho que decir”, indicando que no hay tanta limitación entre las ciudades y su entorno metropolitano como sucede en Valencia.

Itene aprovechó la jornada para presentar sus últimos proyectos.
Itene aprovechó la jornada para presentar sus últimos proyectos.

Explicó que “hay nuevos modelos empresariales, donde los datos son el bien más valioso de las empresas con una gestión inteligente, con las que tenemos que trazar puentes”, con nuevos problemas abiertos como la micromovilidad, la electromovilidad y las zonas de emisión cero, “donde los modelos de negocio tienen que ser sostenibles”.

Asimismo, Cristian Ramirez, concejal de movilidad del Ayuntamiento de Castellón, explicó que la ciudad ha empezado a adaptar un proyecto de zona de bajas emisiones, donde se han corregido las restricciones que se planteaban en su momento. “Queremos que el centro no se llene de coches, pero atendiendo al tejido empresarial y hotelero porque no podemos transformar la ciudad sin las personas y las empresas”, señaló Ramirez.

Entre las medidas aplicadas se ha permitido el reparto de última milla, se han incorporado pavimentos que reducen la contaminación, aparcamientos disuasorios, aumentando las zonas verdes, “dentro de nuestros objetivos de hacer Castellón una ciudad más verde, con el compromiso de plantar 5.000 árboles en esta legislatura”. Para ello abogó por el “control y regulación, pero con las restricciones justas”.

Por su parte, Juan Bueno, de la asociación Movea, abordó las innovaciones en logística y transporte en el mercado asiático, en concreto puso el ejemplo de Japón, abogando por una armonización de las ordenanzas de movilidad en los municipios de España.

Señaló que “Japón es un líder en movilidad logística, un espejo en el que podemos mirarnos”. Citó los ejemplos de las empresas Rakuten con la implementación de drones para el reparto de mercancías en zonas rurales, la integración de robots por parte de Nippon Express en sus centros de distribución para la recolección y clasificación de productos, y la implementación de camiones eléctricos de la mano de Yamato Transport para la entrega de mercancías en zonas urbanas. Por último, destacó que el tren bala japonés, el “Shinkansen” se está utilizando también para el transporte de paquetería, y, en concreto, para el envío de fruta y verdura.

La descarbonización del transporte urbano se centró en la presentación de las “buenas prácticas” de la empresa GLS Spain, ahondando en soluciones y tecnologías para el reparto de última milla en zonas de bajas emisiones.

Jorge Gíménez, director de la división Este de GLS Spain.
Jorge Gíménez, director de la división Este de GLS Spain.

Jorge Giménez, director de la división Este de GLS Spain, señaló que “la red abierta de 650 pymes que forma nuestro grupo nos permite entrar en un análisis en local de cada una de las ciudades, ya que cada ayuntamiento tiene una política de movilidad distinta”, matizando que “somos una multinacional con gestión local”.

Giménez señaló que en 2030 toda la flota de empresa será eléctrica, recalcando que “en la división Este todos nuestros coches ya son eléctricos” y que para 2045 toda la flota de reparto sea con cero emisiones. Avanzó que GLS ha empezado a hacer pruebas con tractoras eléctricas para trayectos cortos e impulsando las entregas alternativas, con puntos de conveniencia y lockers, dentro de la estrategia medioambiental de la empresa. Asimismo, señaló que la empresa está aplicando más tecnología y el uso de la energía verde en sus centros de distribución, “con un reto complejo que tenemos con la última milla”.

Entre los proyectos, Giménez detalló el convenio firmado hace un año con el Ayuntamiento de Valencia para la utilización de la primera planta del parking de Brujas con el establecimiento de un microhub, donde la huella es cero, desde el hub de Ribarroja al centro de Valencia se realiza todo con vehículos eléctricos, por el que se realizan alrededor de 3.000 expediciones. “Nuestro objetivo es avanza en esta línea en Málaga, o como en Madrid, donde tenemos un convenio con Metro Madrid para la utilización de un vagón por el que distribuimos mercancías entre el norte y sur”. Indicó que “hay un reto de infraestructuras a la hora de abordar estos proyectos”. Por último, Giménez señaló que “es importante contar con las personas para la última milla, porque tenemos a miles de personas que reparten a pie”.

Por otro lado, se abordó la puesta en marcha de sistemas de electromovilidad en el transporte y la logística en las ciudades con la experiencia de las empresas Orbis y Cooltra que vienen prestando servicios en este ámbito.

Por último, se abordaron los procedimientos de digitalización e inteligencia artificial para una movilidad más eficientes con el desarrollo de políticas y estrategias innovadoras en las ciudades para el transporte urbano de mercancías y personas, un papel en el que las empresas Siemens Mobility y Nommon Solutions, abordaron sus principales claves junto a la Fundación Valenciaport.